El Gobierno hizo oficial el retorno del gas licuado de petróleo (GLP) al Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles para reducir el precio del balón de gas. Pero, ¿será totalmente efectivo?
Para el ex ministro de Economía y Finanzas, David Tuesta, la medida podría dar alguna tranquilidad a los hogares, pero que este efecto se esfumaría rápidamente.
Según explicó, la mayor parte del subsidio que otorgue el Gobierno se quedará en la cadena de comercialización del balón de gas, es decir, en las empresas envasadoras y distribuidoras.
«Las experiencias pasadas que hemos tenido con el mecanismo de estabilización del precio del gas es que al final se traslada en un mínimo impacto sobre el precio de este producto porque gran parte de este subsidio termina quedando entre todo el enmarañamiento que tiene la distribución y venta del producto», precisó en RPP Noticias.
Asimismo, mencionó que este beneficio cubriría en mayor parte a los sectores socioeconómicos de ingresos más altos, pues los segmentos más bajos usan menos el GLP.
«Realmente este no es un beneficio que vaya a los pobres», precisó.
El economista también consideró que esta decisión del Ejecutivo es un mal uso de los recursos, y que sería mejor la entrega de ayudas directas como el Bono del Fondo de Inclusión Social Energético (FISE), que otorga descuentos para la compra de balones de gas.