Según economistas, Decreto Supremo para limitar la tercerización laboral en actividades que forman parte del “núcleo del negocio” no traería efectos positivos.
El Gobierno aprobó un Decreto Supremo para limitar la tercerización laboral en actividades que forman parte del “núcleo del negocio” y algunos ya se hacen la pregunta: ¿Tendrá algún impacto?
Para Miguel Jaramillo F., economista principal del Consejo Privado de Competitividad (CPC), se pone en riesgo alrededor de 105.000 puestos de trabajo, un 3 % del empleo privado formal asalariado.
“Hay consecuencias que este DS tiene sobre la competitividad de las empresas y sobre el empleo. Por más bien intencionada que sea la norma, no se evalúan estos efectos sobre sectores claves de la economía, sobre más de 900 empresas de tercerización existentes y sobre cerca de 105.000 trabajadores formales contratados en este tipo de empresas”, remarcó, en declaraciones citadas por Gestión.
Por citar un ejemplo, la encuesta nacional de empresas del INEI dice que el 76 % de empresas de construcción, sector clave para Ia economía, usan la tercerización, y en minería es alrededor del 64 %.
Si bien el “candado” que pone el Decreto Supremo es que el trabajador tercerizado en una actividad del “núcleo” pasaría a la planilla de la empresa principal. Jara millo F. recordó que en México se aprobó una normativa similar y “el 46 % de los trabajadores afectados por la norma no fueron incorporados a planilla”.
“Además, en Ecuador -en 2008- se prohibió la tercerización y el 37 % de empresas cerraron sus operaciones y el 80 % de trabajadores fueron desempleados”, agregó.
Por su parte, Miguel Jaramillo B., investigador principal de Grade, dijo que esta norma va “en contra de cualquier intento de apoyar un proceso de reactivación del empleo, y en particular del formal”.
“No espero efectos positivos, sino los que va a haber son negativos”, refirió.
Vía: Gestión